¿Para qué sirven las vacaciones?

Muchas veces andamos por la vida, sin parar a reflexionar en el valor o sentido que tienen ciertos eventos para nosotros, estamos a punto de empezar las vacaciones, esos meses en donde los niños no tienen colegio, nuestra rutina y plan de vida cambia rotundamente, trayendo momentos inolvidables y también para nosotros como padres, estrés y cansancio. Estando a pocos días de comenzar esta odisea, te cuento

que existen diferentes investigaciones y estudios que pueden cambiar tu perspectiva sobre estos meses, ¿sabías que las vacaciones no son solo un evento más en el calendario?

Las vacaciones juegan un papel importantísimo en nuestras vidas, tienen un alto impacto en el desarrollo de nuestros hijos, e inciden de forma directa en el sistema familiar. Durante las vacaciones:

• Vivimos experiencias comunes, que fortalecen la identidad familiar, dando con ello un sentido de pertenencia, que incide directamente en la seguridad del niño.

• Las experiencias vividas se transforman en una maleta de recuerdos que nos acompañará durante toda la vida, y servirán en el futuro de cada miembro de la familia, como una base que nos da estabilidad emocional y como un colchón en tiempos adversos.

• Salimos de la rutina, y con ello podemos descubrir nuevas fortalezas y cualidades en nuestros hijos, y ellos a su vez en nosotros. Conociéndonos mejor fortalecemos nuestros lazos.

• La mayor parte de los temas de conversación en nuestra familia son acerca de nuestra rutina, tareas y vida diaria. El cambio de ambiente propicia nuevos temas de conversación, abriendo puentes de comunicación, en donde se facilita la expresión emocional.

• El tiempo libre propicia el contacto con el arte, la música y la naturaleza, este contacto nos libera del estrés, nos centra en el presente y permite conectarnos con nosotros mismos.

• El cambio de ambiente, la visita a nuevos lugares, la convivencia con gente distinta, son terrenos fértiles para el desarrollo de nuevas herramientas sociales en los niños.

Estos son solo algunos de los ámbitos en donde las vacaciones pueden aportarnos grandes cosas, saberlo nos ayuda a vivirlas con un sentido distinto e inspirador.

Para que estas experiencias puedan darse de la mejor manera, Switch te sugiere que durante las vacaciones:

• Seas flexible en el orden, los horarios, recuerda que la dinámica familiar no funciona como en la vida diaria. Suelta el cuerpo y deja pasar los pequeños incidentes, siendo flexible podrás generar un ambiente armónico.

• Respeta los horarios de comida y sueño, de tus hijos. Aun cuando las vacaciones nos liberan de la rutina y de los horarios rígidos es importante que los niños tengan cubiertas sus necesidades básicas. Planear y respetar estos horarios aseguran un mejor humor en los niños, te dejan tiempo libre, y aminoran los roces entre la familia.

• Limita el tiempo de uso de los dispositivos electrónicos. Recuerda que para poder vivir experiencias comunes, tener conversaciones, almacenar momentos felices y fortalecer lazos es necesario vernos a la cara, esto solo es posible si hacemos a un lado las pantallas. Fija horarios para el uso de los dispositivos, al despertar y después de comer, pueden ser útiles distractores. Guárdalos después, recuerda que para conectar como familia, hay que desconectar los dispositivos.

• Libérate de querer hacer planes todo el día. Vivimos en una ciudad que nos demanda un gran número de actividades y hemos perdido el “arte de no hacer nada”, sintiéndonos culpables cuando no tenemos una actividad a donde correr. El no hacer nada, baja los niveles de estrés, nos permite vivir el presente, propicia en los niños la creatividad y la fantasía y abre el espacio para la reflexión.

• Involucra al niño en la planeación de actividades o tareas del hogar. Poner la mesa, empacar el lunch, preparar la botana, etc; son pequeñas actividades en donde tu hijo adquiere una habilidad, hace algo para la familia, se entretiene, y se siente útil, orgulloso y reconocido por su trabajo.